Las expectativas para la eventual actualización del Mac Pro de Apple eran bastante altas, pero se han moderado después de que un nuevo informe afirmara que el Mac modular y actualizable podría no ser tan modular o actualizable como se podría pensar.
La transición al silicio de Apple para los Mac de gama alta de la compañía se ha hecho esperar y se espera que finalmente se produzca en 2023. Pero ya habíamos oído que la forma en que funcionan los chips de Apple podría significar que la RAM no será actualizable por el usuario y ahora parece que la misma suerte correrá también la GPU.
Mark Gurman, de Bloomberg, ya había dicho que la RAM actualizable era imposible porque está estrechamente integrada con los chips de la serie M. Ahora, ese mismo problema parece que también afectará a la GPU. Ahora, es probable que ese mismo problema impida instalar una GPU propia. La posibilidad de instalar GPU posventa es una de las razones por las que los usuarios con flujos de trabajo exigentes se decantaron por el Mac Pro.
Una vez más, es Gurman quien da la mala noticia, señalando que los Mac de silicona de Apple no admiten actualmente GPU externas. Esto por sí solo podría sugerir que el Mac Pro no permitirá a los usuarios colocar una en su carcasa, por mucho espacio que haya en ella.
El argumento de Gurman de que la GPU del Mac Pro soportará hasta 76 núcleos podría no ser suficiente para evitar que algunos potenciales compradores del Mac Pro se sientan decepcionados, por desgracia. Dado el precio que tendría un Mac Pro, algunos compradores ya están sugiriendo que la potencia gráfica no estará a la altura.
En cuanto a lo que los compradores de Mac Pro podrán actualizar, empieza a parecer poco. El almacenamiento será una opción, mientras que parece probable que se admitan tarjetas de expansión especializadas cuando Apple anuncie por fin el último Mac en pasar a sus propios chips.